Se ha creado un espacio de coworking donde el vidrio es el material principal, con el propósito de ofrecer un entorno completamente transparente. En la fachada, se han instalado una serie de tirantes con enredaderas y se ha añadido un pretil con arbustos alrededor del perímetro, creando una experiencia única para el usuario y brindando la sensación de estar en un entorno natural. Además, se ha integrado vegetación en unos lucernarios, alrededor de los cuales se ha colocado una mesa de trabajo para potenciar esta sensación.
Para incrementar la funcionalidad y adaptabilidad del espacio, se han incorporado elementos correderos en los vanos, lo que permite crear un gran espacio interior-exterior. Esta característica favorece la relación entre las zonas de trabajo y reunión, ajustándose a las necesidades cambiantes de los usuarios. Por ejemplo, se pueden abrir completamente los vanos para una reunión al aire libre en un día soleado, o cerrarlos para una sesión de trabajo más privada y tranquila. Esta flexibilidad no solo mejora la comodidad, sino que también fomenta la creatividad y la colaboración en un entorno dinámico y natural.
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